Museo Hermandad de la Vera-cruz
2013. Patrimonio de la Hermandad
C/ Roelas, 1

Cuando en 1998 el Ayuntamiento de Olivares se trasladó al recién restaurado Palacio del Conde-Duque salió a subasta pública su antigua sede, situada en la calle Roelas nº 1, colindante con la Capilla de la Santa Vera Cruz. La Junta de Gobierno de la Hermandad de la Santa Vera Cruz consideró esta una oportunidad magnífica para conseguir un local que reunía unas condiciones inmejorables por su situación y espacio para albergar la futura Casa de Hermandad. De este modo se reconquistaba totalmente el patrimonio histórico de la corporación con la futura puesta en funcionamiento de la Casa de Hermandad en el sitio originario en donde estuvo ubicado el Hospital de la villa, cuyos terrenos donó en 1560 la primera Condesa de Olivares, Doña Francisca de Ribera Niño.
En febrero del año 2000 la Hermandad recogía las llaves del edificio tomando posesión del mismo y de inmediato inicia el estudio del proyecto de adecuación del inmueble para la construcción de la Casa de Hermandad. De esta manera se consiguió un objetivo largamente anhelado pues el 12 de Octubre de 2013 se bendice e inaugura la actual Casa de Hermandad.
Consta de tres plantas, permitiendo un desarrollo armónico, tanto en el orden administrativo, expositivo, como el propio de labores de Priostía y convivencia para la corporación.
Al acceder al interior de la Casa de Hermandad, en la planta baja, nos encontramos un recibidor con una escalera principal que da acceso a la primera planta. Además consta de un amplio salón de actividades, el salón-vitrina donde se encuentra ubicado el Paso del Santísimo Cristo de la Salud, un patio interior cerrado con una espectacular vidriera, un despacho para tareas administrativas, los servicios, la cocina y una sala de usos múltiples, así como el acceso a través de la Sacristía a la Capilla de la Santa Vera-Cruz.
Destacan en la planta baja la magnífica vidriera que cierra el patio interior, obra del taller de Vidrieras artísticas Antonio Salgado, decorada con profusión de elementos entre los que destacan en los ángulos la representación de los titulares de la Hermandad.
Seguidamente en un amplio salón-vitrina podemos encontrar expuesto el Paso del Santísimo Cristo de la Salud, maravillosa obra de estilo barroco tallado en 1949. Este estupendo trabajo fue realizado por el olivareño Luis Jiménez Espinosa, medalla de bronce de la ciudad de Sevilla en 1969, famoso en el mundo cofrade por sus muchas obras, que lo pregonan como uno de los mejores tallistas contemporáneos, llevando, además del arte y la pericia de su autor, el cariño con que lo realizó para su pueblo. Participó en la tarea de la talla del Paso, siendo aún muy joven, el trianero Manuel Guzmán Bejarano, oficial mayor de su taller y posteriormente consagrado artista. En el centro de cada una sus caras se encuentra una artística cartela pintada y policromada que sostienen dos angelitos debidos a la gubia de Rafael Lafarque. La cartela delantera contiene el escudo de la Hermandad y la trasera el escudo franciscano; la del costado derecho lleva la inscripción Ego Sum Veritas, Yo soy la Verdad, y la del costado izquierdo Ego Sum Salus, Yo soy la Salvación. Las cartelas de las cuatro esquinas van ocupadas por los bajorrelieves simbólicos de los cuatro evangelistas. Los respiraderos, del más puro barroco sevillano, son de una talla magnífica por su profundidad y belleza, dorado en oro fino con adornos frutales policromados. El dorado completo en oro fino del Paso del Santísimo Cristo de la Salud fue costeado por la hermana Camarera doña María Josefa Pérez Calvente, viuda del que fue Hermano Mayor, don Álvaro Alcaide de la Oliva. En 1990 se estrena el llamador realizado por el orfebre Fernando Marmolejo que representa el relieve de mármol genovés situado sobre la entrada del Palacio del Conde-Duque de Olivares y en el que figura el escudo de los Guzmanes flanqueado por dos arpías, recordando que la Hermandad de la Santa Vera Cruz fue fundada por el I Conde de Olivares, don Pedro de Guzmán en 1552. En el año 2003 se estrena la ampliación de la canastilla del Paso y un nuevo juego de airosos candelabros dorados de guardabrisas de siete luces los de las esquinas, y de cinco los laterales realizado por Manuel Guzmán Bejarano y dorado por Serafín Jiménez. Los guardabrisas de sus candelabros están rematados por coronitas realizadas en plata de ley sobredoradas.
Destaca también en la escalera que da acceso a la primera planta la antigua cruz arbórea del Santísimo Cristo de la Salud, obra de finales del periodo barroco pues sabemos que se realizó en 1774, así como una artística vidriera de la Virgen de las Nieves, patrona de Olivares.
En la primera planta se encuentran ubicados los despachos de Secretaría, Mayordomía y del Hermano Mayor, el archivo, la sala de Juntas donde se celebran los Cabildos de oficiales y reuniones, así como las vitrinas que acogen el tesoro patrimonial de la Hermandad.
Preside la sala de Juntas el Simpecado de Nuestra Señora de la Antigua, diseñado por el artista José Asián Cano y bordado en oro sobre terciopelo verde que contiene un óvalo con una pintura que representa a la Virgen de la Antigua de la Catedral de Sevilla. Junto a él se encuentran una pareja de ángeles pasionistas que cronológicamente podrían situarse hacia finales del siglo XVII en el círculo cercano a la figura de Pedro Roldán, pero por el modo en que la ornamentación se encuentra realizada, tendríamos que situarla en una etapa más tardía, cercana al periodo Rococó, esto es, principio del Siglo XVIII; tras ser restaurados procesionan el Jueves Santo en el Paso del Cristo de la Salud delante de los guardabrisas laterales. También en esta sala destacan cuatro pinturas de buena factura, dos de ellas representan a la Virgen de Guadalupe y al Ángel de la Guarda siendo obras anónimas de factura novohispana que pueden fecharse a mediados del siglo XVIII, las otras dos representan a San Joaquín y a San Juan Evangelista realizadas con un marcado tenebrismo por lo que pudieran fecharse hacia mediados o finales del siglo XVII.
Seguidamente existen dos salas en las que además de albergar de manera ordenada los enseres de la corporación sirven como muestra del patrimonio artístico de la Semana Santa de Olivares con un discurso museográfico. El visitante podrá contemplar la orfebrería, los diferentes bordados, insignias de la Cofradía y un rico ajuar litúrgico entre otras piezas. Entre los enseres que pueden observarse con más detalles figuran numerosas piezas que pertenecen al ajuar de los titulares de la Hermandad.
En la primera de las salas destacan las dalmáticas y la ropa de pertiguero usadas durante la procesión del Jueves Santo, también una serie de casullas bordadas en distintos colores empleadas dependiendo del tiempo litúrgico. Encontramos aquí la ráfaga de orfebrería usada por la Virgen de la Antigua durante el Domingo de Resurrección, pieza de finales del siglo XVIII y la saya bordada en oro más antigua que se conserva, atribuida a la bordadora sevillana Patrocinio López.
En la segunda sala podemos encontrar toda la orfebrería del Paso de Nuestra Señora de la Antigua, es decir, la candelería, peana, candelabros de cola y jarras se deben a la orfebrería de Hijos de Juan Fernández, quienes elaboraron estos enseres hacia 1970 aproximadamente. De los mismos orfebres son los respiraderos estrenados en 1988 en cuyo frontal hay una imagen en plata de ley de la Patrona de Olivares, la Virgen de las Nieves, que fue donada por un grupo de hermanos y hermanas devotos. El juego de varales es obra de Orfebrería Villarreal realizados en 1991. También se encuentran aquí una serie de sayas de la virgen bordadas en oro sobre terciopelo, al igual que algunas de las insignias empleadas por la cofradía durante el Jueves Santo, como la bandera pontificia, el Senatus o la bandera concepcionista.
Destaca en esta sala el conjunto de los bordados en oro del paso de palio cuyas bambalinas y techo fueron ejecutados en el Convento de Santa Isabel de Sevilla, conteniendo la gloria del techo una Inmaculada Concepción tallada en relieve por el escultor Rafael Barbero Medina en 1964. También se conserva aquí el antiguo manto de cofradía y el manto de terciopelo rojo bordado en oro en el taller de José Caro. El 22 de marzo de 2015 se presentó y bendijo un nuevo manto sobre terciopelo verde para Nuestra Señora de la Antigua, que bajo diseño de Francisco Javier Sánchez de los Reyes fue realizado en el Taller de doña Charo Bernardino con piezas en su mayoría bordadas en oro fino y otras bordadas en plata, que se complementan y ponen en valor unas a otras, así como piezas ejecutadas en sedas de colores.
La Casa Hermandad-Museo de la Santa Vera Cruz contiene de este modo importantes testigos históricos, manteniendo la vanguardia y original exposición durante todo el año de los elementos propios de la liturgia, los cultos internos y, cómo no, de la Cofradía en la noche del Jueves Santo.